¿Quién hace el nuevo México?. 25.08.2014

El día de ayer, 24 de agosto, se hicieron 4 años que escribo la columna Marketicom para el diario Síntesis de Puebla. Aprovecho esta columna para agradecerles el espacio  para las más de 200 columnas que he escrito, por dejarme seguir escribiendo y por la confianza. Muchas gracias a todos.
 
Y aprovechando que se acerca el mes patrio, me he permitido hacer unas reflexiones sobre mi país. 

No voy a hacer comparaciones porque comparar a mi país con otros no me parece de ninguna manera constructivo. Cada país tiene una historia y las circunstancias que en ella se vivieron, han hecho que estos países ahora tengan el país que tienen, y lo mismo sucede con México. Más bien quiero centrarme en lo que podemos hacer cada uno de nosotros.

Si sabemos en qué estamos fallando, ¿por qué no lo hemos cambiado?. Día con día leo las noticias de mi país y los comentarios que los lectores dejan debajo de cada una de ellas. En repetidas ocasiones se refieren a las cosas que suceden como “así ha sido siempre”, “lo mismo”, y lo que es peor, lo comparan con otros países y aseguran que “si estuviéramos en tal o cual país”, todo sería perfecto, cuando para conocer en realidad un país, hay que vivir y trabajar en él, pero sobre todo, pagar sus impuestos y hacer uso de sus servicios o involucrarse en las políticas sociales del país, leer sus noticias, escuchar a sus políticos y dirigentes. Las vacaciones no cuentan, estar en un lugar turístico, por obvias razones, nos hace ver sólo lo más bonito de ese lugar. Y trabajar un año o dos en alguna empresa tampoco, pues muchas veces la compañía está pagando los gastos en el extranjero y no es posible apreciar la realidad que se vive en el país. Cuando empezamos a seguir las “reglas del juego” de un país, a acatar las leyes, a pagar los impuestos, a hacer uso de los servicios públicos, etc., a intercambiar opiniones con sus ciudadanos, a conocer de primera mano los beneficios o dificultades que enfrentan sus ciudadanos para vivir en un país, las cosas se ven de otra manera. No todo es perfecto y cada país tiene su talón de Aquiles. 

Si queremos un cambio para México, debemos empezar por cambiar nosotros mismos; por creer, primero que nada, que somos parte de una sociedad, y que por consiguiente, el cambio debe empezar por nosotros. Pero si estamos esperando que de repente todos los mexicanos “se unan” y empiecen a “cambiar”, la espera será muy larga. El futuro de nuestro país es ahora, cada día. Hay que hacer nuestro trabajo con calidad y comportarnos como quisiéramos que todos los ciudadanos lo hicieran.

A los que vivimos en el extranjero, muchas veces nos toca lidiar con los viejos estereotipos que de nuestro país se tienen; con la ignorancia, porque dejarse llevar por los estereotipos de un país es no conocer su verdadera realidad, hacerlos a un lado y seguir adelante. Porque el estereotipo que tengan de nuestro país, no nos hace ser como la gente piensa que somos todos. Nos toca actuar con calidad, honestidad, responsabilidad y compromiso, como siempre lo hemos hecho. No sólo porque ahora vivimos en otro país, sino porque así hemos sido siempre y así somos muchos mexicanos.

El tiempo es hoy y la responsabilidad es nuestra. Celebremos las fiestas patrias con reflexión y contribuyamos todos a hacer de México un mejor país.

Buen inicio de semana para todos y nos leemos el próximo lunes.